La impactante morena sí que supo cautivar la mirada de varios con su escaso atuendo y sus calientes bailes, y no fue una simple bailarina más, sino que fue la reina del carnaval.
Un traje pequeño con incrustaciones de piedras fue lo único que le tapó las partes privadas, que en alguna otra oportunidad ya le conocimos. Llena de plumas rojas y con un jarro de alcohol en la mano, encabezó el desfile y no vaciló en demostrar cuan osados pueden ser sus bailes. En una de las fotos de la galería podrán notar como una mujer le aprieta los senos, y en otra, un hombre hace movimientos obscenos por detrás de la cantante, que se agacha para facilitarle el paso y parece que le gusta esa postura al ver que unos cuantos más lo pudieron hacer con ella sin importarle nada.
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