
Un gesto tan simple como tocarte el pecho haciéndolo botar durante un par de segundos puede ser la mejor campaña publicitaria que se haya inventado. Así, la actriz de House, Olivia Wilde, es la portada del numero de abril de la revista GQ y sus directores le han pedido que protagonice un "hipnotizante" vídeo para vender el reportaje.
Es un vídeo en el que ella dice: "Hola soy Olivia Wilde, bienvenidos al GQ Comedy Issue" pero, mientras dice esto se toca los pechos.
¿A vosotros qué os parece la campaña de GQ? Interesante o una gilipollez. Yo con ver a Olivia Wilde ya estoy contento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario