Lástima que la noticia de The Sunday Times explicando que la ONU ha nombrado a un interlocutor para el día en el que los extraterrestres lleguen a la Tierra sea falsa. Publicó que habían designado a una astrofísica malasia, Mazlan Othman, como embajadora de la ONU para el Espacio.
La ONU detalló que el nombramiento de Othman se deriva de la cantidad de planetas en órbita descubiertos recientemente y las últimas aportaciones de la National Aeronautics and Space Administration (NASA), lo cual incrementa la posibilidad de que la raza humana realice contactos con seres extraterrestres en algún tiempo.
En teoría Othman era la encargada de coordinar la respuesta conjunta que los terrícolas daríamos en cuanto el primer ovni aterrizase, y las competencias exactas de su cargo las explicaría esta semana. Prometían ser jugosas: recordemos que, ante el evidente peligro al que nos enfrentamos (virus desconocidos a la par que alienígenas), la ONU tiene decidido que la solución es "esterilizar" a los alienígenas. Pero, en fin, Othman ha dicho que el nombramiento es una fantasía del Times. Lo dicho: lástima.
El proyecto Disclosure, denuncia que el Gobierno estadounidense esconde pruebas de que los ovnis son naves pilotadas por extraterrestres. De ahí pasé a enterarme de la existencia de las unicornios rosas invisibles. Sólo me faltaba leer, la semana pasada, que el presidente de la Federación Internacional de Ajedrez dice que ese juego de mesa lo trajeron extraterrestres. Da diversos motivos, el más impactante de los cuales es que el tablero tiene 64 cuadrados: ¡el mismo número de codones que hay en el ADN humano! A destacar que en 1997 los alienígenas se lo llevaron a un ovni, donde estuvo de charleta con ellos.
VAMOS QUE UN DÍA DE ESTOS Y FUERA DE BROMAS HABRÁ UNA SORPREA INFORMATIVA Y YO LA VERDAD NO ME CAUSARÍA SORPRESA.
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